Un trasvase es una obra de tipo hidráulico que consiste en transportar de forma segura el agua de un
sector o región a otro donde hay escasez. De esta manera se garantiza el buen
uso y reparto de este recurso para las diferentes poblaciones. Dichos proyectos
pueden causar un impacto negativo sobre el medio ambiente, tanto el ecosistema
del que se extrae el agua, como el que la recibe. Esto debido a que el
transporte de líquido se lleva a cabo con todo lo que este contiene: sales
disueltas, sólidos en suspensión suspensión, semillas o esporas de
microorganismos, etc. Sin embargo, hay que poner en consideración los múltiples
usos que los trasvases pueden brindar, entre los principales se
encuentran:
encuentran:
- El abastecimiento de agua potable a ciudades con un número
de habitantes superior al que podrían soportar los recursos hídricos de la
cuenca donde se sitúa la ciudad.
- El riego, se hace necesario cuando las tierras de buena
calidad se encuentran en áreas con escasos recursos hídricos.
- La generación de energía hidroeléctrica, son una forma de
construir embalses más pequeños y maximizar el uso de la potencia instalada en
la central Hidroeléctrica
Desde una perspectiva general, los trasvases son obras que
mejoran nuestra calidad de vida; y ninguna alternativa de mejora debería ser
rechazada. Para optimizar su funcionamiento y reducir al mínimo los daños
ambientales solo sería haría necesario mejorar los estudios en las regiones, así
como sus problemáticas y el aporte de posibles soluciones.
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