CANAL DE PANAMÁ

Hace más de un siglo se llevó a cabo la construcción del Canal de Panamá, uno de los proyectos de ingeniería más importantes a nivel mundial. Tuvo su origen gracias a la competencia entre franceses y estadounidenses por dominar el comercio mundial, se quería encontrar una ruta que conectase ambos océanos (Pacifico y Atlántico) y Panamá fue su principal objetivo.

Desde finales del siglo XIX la ambición de las grandes potencias económicas era la apertura del Canal de Panamá ya que esta “megaobra” permitiría cruzar de un océano a otro sin tener la necesidad de rodear todo el continente, es claro el recorte de distancias y tiempo que le lleva a miles de barcos desplazarse del océano Pacifico al Atlántico, lo que se traduce en una optimización de gastos del comercio marítimo. Todo comenzó con la iniciativa francesa pero los que lograron concluirlo fueron los estadounidenses. A principios del siglo XX, al ser inaugurada la gran obra de la ingeniería comenzó a cambiar al mundo; esta ruta de transporte marítimo abrió muchas puertas y posibilidades en el mercado internacional y favoreció de manera indiscutible al proceso de globalización; a diferencia de las otras obras de la ingeniería, el Canal de Panamá, ha aportado enormemente al desarrollo económico del mundo entero.

Pero hay que considerar que la construcción de éste fue un proceso duro y podría decirse que invasivo; esta maravilla del mundo moderno rompió un país y destrozó gran parte de la fauna terrestre solo para facilitar una ruta comercial (que cambió el transporte marítimo para siempre), además las condiciones de los trabajadores no estaban ni cerca de ser aceptables, un factor relevante fue sin duda alguna la cantidad de muertes provocadas por las enfermedades de la selva durante su construcción, lo cual desde un principio fue un riesgo que los ingenieros estuvieron dispuestos a correr. Sin embargo, esta problemática sin ser del todo negativa, promovió campañas en contra de la fiebre amarilla y la malaria, y consiguió la cura de las mismas. Y a todo esto se le puede sumar la lucha de poderes políticos que se libró a cabo de la construcción de este majestuoso proyecto.

Sin embargo no todos los aspectos son negativos, el canal provee agua potable a varias ciudades del país. Actualmente se está trabajando en su ampliación, que aunque es un proyecto nocivo para la naturaleza, ha tratado de disminuir su impacto ambiental con programas que buscan rescatar a millones de especies animales y proveerles nuevos hábitats, de manera que las repercusiones naturales sean las menores posibles.

Tras la construcción del Canal de Panamá el mundo ha cambiado y todo fue posible gracias al arduo trabajo de miles de personas, muchas de ellas que como su obra, lograron trascender en la historia; pero no se puede olvidar todas las repercusiones tanto políticas, como ambientales y sociales que esta maravilla trajo con su creación. Concluyendo podemos decir que Panamá es efectivamente “El país que unió al mundo”.